sábado, 28 de marzo de 2009

KUNA YARGI 1: LA ARMONÍA DE LA MADRE TIERRA: COMPROMISO Y DERECHO





LA VOZ DE LAS CEBS
EL GRITO DE LA MADRE TIERRA

Queridos hermanos y hermanas: las CEBs de Kuna Yala les enviamos un cordial saludo a través de este boletín “Kuna Yargi”, que tiene como fin acortar distancias y unirnos en la lucha por la vida en plenitud de nuestras comunidades. Deseamos que este medio nos ayude a tomar conciencia de los graves problemas que sufre nuestra cultura y nos comprometa decididamente en la causa del Reino de Dios.

En este año 2009 queremos centrar nuestra reflexión en nuestra Madre Tierra, Ologwadiryai, Olodillilisob, Ologwadule, Oloiitirdili, Napgwana, Nana Olobipirgunyai. Queremos levantar nuestra voz como profetas, denunciando la cruel destrucción que ella y sus hijos sufrimos en carne propia. El primer número que ustedes tienen en sus manos está dedicado a la comprensión de la Tierra desde la óptica bíblica judeocristiana y desde la perspectiva kuna en el Babigala.

Como pueblo indígena de Abia Yala disfrutamos de unas buenas condiciones de vida: tenemos nuestro territorio, reconocido a nivel jurídico como comarca; gozamos de cierta autonomía con respecto al Estado y nos sentimos protagonistas de nuestro futuro. Nuestros abuelos y abuelas nos legaron un espíritu fuerte y combativo ante las pretensiones de dominación y de muerte de los poderosos. Muchos de ellos derramaron su sangre por esta tierra en la que vivimos. Sin embargo, las fuerzas enemigas de la política y de la economía se mantienen en pie y quieren la desaparición de nuestra cultura para que nos integremos a la llamada “civilización del mercado”. Esta “civilización del mercado”, liderada por los países ricos, pone en venta todo: la vida ha perdido su carácter sagrado y nuestra Madre Tierra sufre una devastación y destrucción acelerada. Nuestra Madre Tierra grita.

¿Qué podemos hacer como pueblo ante la actual crisis ambiental? ¿Podemos quedarnos callados ante el sufrimiento de tantos hermanos pobres y explotados de otros continentes? ¿Qué hacer ante las descaradas y a veces insospechadas invasiones neocolonizadoras que ocurren día a día en nuestras comunidades? ¿Estamos defendiendo a la Madre Tierra con la misma fuerza que nuestros antepasados?

Tenemos que avivar el fuego de nuestro burba para levantar de nuevo nuestros brazos y nuestra voz ante tanto dolor y llanto que aqueja a la Madre Tierra. Sólo los pequeños, los humildes, seremos los que cambiemos el rumbo de la humanidad. Sólo si nos unimos y buscamos alianzas con los que quieren otro mundo posible podremos revertir la historia. En nuestra tradición podemos reconocernos como gestores de una vida distinta, una vida alternativa. Volvamos al río Igbirdidiwala, como Ibeler, para contemplar nuestro rostro, para descubrir nuevamente lo que nos define como kunas y, como él y sus hermanos, sintamos el dolor de la Madre Tierra, y que ese dolor se transforme en desafío, en lucha. “Los ocho hermanos sintieron el dolor de la madre, las gruesas telarañas de sus ojos, su desnudez, sus llagas; las huellas de Baba marchitas y convertidas en desolación”. Que nosotros también nos lancemos en la búsqueda de un mundo más humano, más justo y en armonía.


NOTICIAS DE PANAMÁ

COMUNICADO: “POR LOS DERECHOS DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS”
25 de noviembre de 2008
Fuente: Kuna Yarky / Por Anelio Merry

Los siete pueblos indígenas de Panamá, aglutinados a través de sus organizaciones tradicionales, representados por sus autoridades legítimamente escogidas, nos hemos reunido por derecho propio para analizar, evaluar y exponer a través de este comunicado la situación actual del Proyecto de Ley N° 411, que se encuentra para discutirse en segundo debate en el pleno de la Asamblea [Nacional de Diputados] .
1. Después de observar la agenda del pleno, nos hemos percatado de que el mismo no aparece como proyecto con urgencia notoria, tal como fue aprobado el día 30 del mes de octubre, cuando fue presentado por el Diputado Presidente de la Comisión de Asuntos Indígenas, H.D. Benito Cases.
2. Este proyecto de ley, por mayoría absoluta de los pueblos indígenas, antes del primer debate había sido consensuado en todos sus articulados con el acuerdo de eliminar los artículos 16 y 17 del Proyecto de ley original presentado por el Órgano Ejecutivo. Ahora el señor Hugo Giraud insiste en mantener estos artículos y pretende incluir los mismos de manera arbitraria, sin tener en cuenta que los mismos no son intereses de los pueblos indígenas.
3. El artículo 16 referido, trastoca el tema de la escogencia de los Gobernadores en las Comarcas Indígenas, en especial la Ley 22 de 1983 que crea la Comarca Emberá y Wounaan de Darién, artículo 14 de esta excerta legal.
El tema de los nombramientos de los gobernadores en la provincia está plenamente definido en el artículo 252 de la Constitución Nacional, por ende ya es materia legislada que no debe establecerse repetidamente en esta Ley.
4. Por otro lado, el artículo 17, que se refiere a la intención de adscribir dentro del distrito de Chepo a la Comarca Madungandi, y dentro del distrito de Chepigana a la Comarca Wargandi, no es más que una violación a los derechos de autodeterminación de estos pueblos.
Por las razones anteriormente expuestas comunicamos a la opinión pública de este país y a la comunidad internacional que nosotros nos mantenemos firmes en nuestra posición de exigir a la Asamblea Nacional de Diputados discutir y aprobar el Proyecto de Ley N° 411 tal como fue consensuado y aprobado en primer debate con urgencia notoria.
Nos mantenemos en estado de alerta y convocamos a todo el pueblo que busca justicia social, a la solidaridad por la causa justa que reclamamos como pueblos originarios de este país.
Dado en la ciudad de Panamá, a los 25 días del mes de noviembre de 2008.
Firman las Autoridades Indígenas de Los Congresos, Consejos y Comarcas Indígenas.


KUNA YALA: ALARMA POR AUMENTO DEL NIVEL DEL MAR
29 de noviembre de 2008
Fuente: Kuna Yarky / Por Anelio Merry

Las dos últimas semanas la Comarca Kuna Yala ha sufrido inundaciones a causa del aumento del nivel del mar. Casi la mayoría de las comunidades están siendo afectadas por el fenómeno, lo que ha creado alarma general. Es tradicional que cada fin de año el nivel del mar se altere y el agua traspase los bordes de las islas, pero este año ha superado los niveles, según ha informado la población.

La comunidad de Dad Nakwe Dupbir, donde estaba previsto celebrar del día 27 al 30 de noviembre el Congreso General Kuna, se vio obligada a solicitar su posposición precisamente por la incidencia de este fenómeno, que afecta a una gran cantidad de familias. Las cocinas estaban inundadas y la preocupación creció ante esta situación.

Breido López, Secretario del Congreso [General] de la Cultura [Kuna] informó desde Gannirdup (Goedup), Kuna Yala, que la subida del nivel del mar se inició el día 13 de noviembre, y ha continuado hasta hace dos días, en que se ha mantenido en sus niveles normales. De acuerdo con López, el día 22 de noviembre fue el día en que se registró mayor aumento del nivel del mar, que subió hasta llegar a la mitad de la isla, hecho que generó mayor preocupación en la población, llegando a la necesidad de plantear el traslado de la población hasta la tierra firme. Una comisión fue designada para buscar alternativas de traslado.

Pablo Solís, Secretario de la comunidad de Nubadup, por su parte informó a Kuna Yarki - Kuna Yala por Dentro, que casi en su totalidad la isla fue afectada y fue imposible cocinar y la gente se mantuvo pendiente. Sin embargo, hasta ahora ellos no han planteado si se trasladan o no. Mientras, toda la comunidad se ha puesto a la tarea de trabajar en rellenos, según informó.

Por su parte, el Corregimiento Nº1, de Nargana, no fue la excepción. En la isla Ukupdup que queda entre las comunidades de Wichubwala y Nalunega, una cabaña no resistió al agua y se desplomó, según se ha reportado. Pero hasta ahora no se informado de mayores daños; sin embargo, no deja ser alarmante la situación en toda la Comarca Kuna Yala.


INUNDACIONES EN COMUNIDADES INDÍGENAS DE PETAQUILLA
3 de diciembre de 2008
Fuente: Panamá Profundo / ewituri-l@lists.laneta.apc.org

El pasado viernes 28 de noviembre, fecha de nuestra independencia de España, fue el día escogido por la nefasta Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM) para dar por aprobado el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de Petaquilla Gold (de Richard Fifer, Julio Benedetti y otros).

Pocos días antes, la misma ANAM había multado y decretado sanción por dos millones de balboas contra Petaquilla Gold precisamente por carecer de Estudio de Impacto Ambiental y haber devastado el sistema ecológico del área, inserta en el Corredor Biológico Mesoamericano. La ANAM, conjuntamente con la multa, decretó la suspensión de todas las compañías integradas a Minera Petaquilla o Minera Panamá.

Aunque dicha multa y sanción provinieron del primer proceso administrativo abierto a Petaquilla Gold, el hecho es que hasta el pasado viernes dicha empresa no tenía un Estudio de Impacto Ambiental aprobado, no tenía perspectivas de aprobación inmediata, no había consultado a las comunidades afectadas ni menos obtenido su aprobación, como manda la ley. ¿Se aprobaron los prerrequisitos legales del EIA?

Petaquilla Gold no había pagado la multa y sanción al momento de darse por aprobado el presunto y sospechoso EIA. Como si fuera poco, sabemos -por informes desde el terreno- que la empresa minera hizo caso omiso de la orden de suspensión y continuó laborando en burla a la ANAM y como afrenta y desafío a las comunidades indígenas y campesinas.

La actitud contradictoria y nada ética del gobierno no puede explicarse sino en presencia de una profunda corrupción a los más altos niveles del Estado que favorece a las empresas.

La descarada conducta demuestra hasta qué punto el presidente Martín Torrijos y Ligia Castro, administradora de ANAM, están dispuestos a ir en contra de las comunidades (por razones que desconocemos), en clara demostración de que en Panamá definitivamente no impera ningún estado de derecho (the rule of law) y que la ley se ha convertido en una mercancía más en esta feria aberrante donde el afán de lucro es capaz de legalizar los más abominables delitos ecológicos y de lesa humanidad.

Para dramatizar y hacer realmente grotesco, descarado e impúdico el inexplicable acto de aprobación del EIA por parte de la ANAM, justamente el viernes 28 de noviembre el Río Palmilla -que desciende del Cerro Petaquilla- inundó la comunidad indígena de ese mismo nombre (Río Palmilla) y arrasó ese día con 6 casas, destruyendo además todos los cultivos y la comida que los indígenas mantenían en reserva para los próximos meses.

La noticia la trajo en la noche del domingo 30 el dirigente de esa comunidad, Tomás Garay, luego de caminar y nadar, atravesando más de 20 pasos de ríos crecidos, durante dos días, para llegar a Coclesito, al primer teléfono público de energía solar en un radio de decenas de millas.

La desesperada situación de Río Palmilla se suma a la desesperanza de la comunidad indígena de Nueva Lucha de Petaquilla, que el domingo 24 de noviembre fue víctima de la inundación que ocasionó el Río Petaquilla y arrasó con 8 casas, dejando decenas de damnificados.

Las aguas de ambos ríos descienden lodosas, señal distintiva de erosión en sus cabeceras y riberas, producida por la tala, el desmonte de los bosques galería y la destrucción de cerros, montañas y ríos por parte de las empresas.

Las inundaciones de las comunidades mencionadas son más graves que las ocurridas en Bocas del Toro y Chiriquí, porque en Petaquilla las empresas han hecho excavaciones y perforaciones en las cabeceras y a orillas de los ríos Petaquilla y Palmilla -que nacen del Cerro Petaquilla- y las lluvias han ocasionado que las aguas, contaminadas con cianuro, mercurio y otros químicos y desechos de combustible, envenenen todas las masas de agua.

En otras palabras, las aguas de los ríos no pueden ser usadas en forma alguna y ni siquiera pueden ser potabilizadas como sí lo son las aguas en Bocas del Toro.

El Comité pro Cierre de Mina Petaquilla, la Coordinadora Campesina por la Vida, la Coordinadora Nacional para la Defensa de Tierras y Aguas y el Servicio Paz y Justicia han recolectado ayuda para la comunidad de Nueva Lucha. No obstante nuestras solicitudes al SINAPROC y a la Cruz Roja Internacional, hasta la fecha no han conseguido un helicóptero para trasladarla, y estamos haciendo el esfuerzo de llevar tal ayuda por tierra al menos hasta Coclesito.



NUEVAS QUEJAS POR INVASIÓN EN MADUNGANDÍ
19 de diciembre de 2008
Fuente: La Prensa / José Somarriba Hernández / jsomarriba@prensa.com

Pese al nombramiento de un corregidor comarcal, Omar Pérez Smith, en la comarca Madungandí, los indígenas residentes en la zona siguen denunciando la invasión de sus tierras por parte de colonos.

El corregidor comarcal es la figura creada, por el Ministerio de Gobierno y Justicia, para sancionar las invasiones de tierras comarcales y mediar en los conflictos entre indígenas y colonos.

Los colonos están agrupados en “el sindicato”, un grupo de poco más de 300 agricultores del corregimiento de Tortí, distrito de Chepo, dirigido por Alcibiades Batista, quien tiene 26 años de residir en el sitio, y a quien los aborígenes señalan de promover las invasiones.

Álvaro Pérez, vocero del Congreso General Kuna de Madungandí, denunció que en ocho meses los invasores se han tomado unas 200 hectáreas más, pues en abril, cuando casi se enfrentan ambos grupos, tenían 2 mil hectáreas de comarca. No se pudo localizar a Batista para conocer su versión.


ENTREVISTA CON NUESTROS AMIGOS

Compartimos en este espacio del Kuna Yargi con el sacerdote diocesano kuna Aiban Wagua. Durante muchos años él ha profundizado, de la mano de grandes sabios de nuestro pueblo, en los tratados del Babigala. Él forma parte del Equipo Misionero de Kuna Yala y trabaja también en el proyecto de Educación Bilingüe Intercultural (EBI).

¿Cuáles son los rasgos esenciales que caracterizan la relación de los kunas con la tierra, según el Babigala?

El Babigala marca el horizonte, el ideal, el proyecto de vida y la utopía del pueblo kuna. En él encontramos definidas las relaciones que tiene la Madre Tierra (Nabgwana, Ologwadule, Oloiitirdili…) con sus “abgilagan” (criaturas, hijos/as) y, a la inversa, las relaciones del ser humano con la Madre Tierra. En el Babigala, las relaciones de la Madre Tierra con los hombres y mujeres forman parte de la cadena de relaciones de todos los seres del pluriverso. Ambos son considerados como un eslabón más en la gran cadena de todos los seres, “abgilagan de Nabgwana”. Esto quiere decir que, el hombre y la mujer no se ubican en la centro de las relaciones, sino que todos los seres (todos vivos), en su respectivo puesto sobre la Madre Tierra, son tan importantes como el hombre y la mujer. La Madre Tierra “tiene ocho tipos de leche” que regala a todos sus hijos, y los regala a todos y a todas, a sus hijas piedras, arrieras, moscas, plantas… Precisamente de ahí surge la complementariedad de los seres; todo se funda en la necesidad de complementarse, de perfeccionarse. Por su parte, el varón y la mujer forman parte de la totalidad del cosmos, desde su especificidad marcan una relación peculiar con la Madre Tierra y, desde su identidad cósmica, jalando la “ubre” de la Madre Tierra, consolida y perfecciona así su humanidad, se humaniza cada vez más. Eso sería, a grandes rasgos, lo que nos ofrece el Babigala.


¿Y cómo se expresa, en la vida concreta de Kuna Yala, la relación ser humano-Madre Tierra?

Cuando los sailagan se refieren a las relaciones con Nabgwana, los términos más utilizados son: akwed (cuidarla, custodiarla, nutrirla); irwa gwisgued (defenderla, alzarse a favor de...); y ga moryoed (vestirla, cuidarla, hacerla producir.

Los abuelos en 1925 entendieron muy bien esa relación con la Madre Tierra. La revolución surge del Babigala y forma parte de su contenido global. Cuentan que en el periodo del alzamiento los sailagan multiplicaban sus cantos en onmakednega, y los temas sobre los cuales giraban sus cantos eran la lucha de Ibeler y Biler, la lucha de Duiren, la creación de la Madre Tierra… que son partes fundamentales del Babigala.

El Babigala, lamentablemente, no ha llegado a permear toda la actividad de los/as kunas; “es una tensión permanente hacia”. Se ha debilitado mucho la manifestación de los contenidos del Babigala en la vida del pueblo. Las causas son variadas e interconectadas. Por un lado, no podemos minimizar los atropellos que reciben los kunas de los antivalores de la sociedad, que no es sólo “dominante” sino, también “aplastante”. Este es el problema de todos los pueblos, culturas y grupos que tratan de ofrecer alternativas nuevas de vida, al margen del consumismo recalcitrante. Por otro lado, las acciones concretas que expresaban los contenidos fundamentales de nuestra tradición, hace cincuenta o sesenta años, hoy están debilitadas: onmakednega está quedando al margen de las grandes decisiones de las comunidades; antes nuestras autoridades gozaban de gran prestigio por sus conocimientos del Babigala, hoy son puestos en la hamaca sin mayores estudios; la Madre Tierra en muchas comunidades está en riesgo de ser considerada “madrastra” y ya no “Madre”. Corre el peligro de ser vendida y sobre ella está puesta la mira de los mineros, de los hoteleros… nos podrán sorprender si no nos levantamos pronto.

La actual crisis ecológica forma parte de este conjunto de problemas. Los responsables de la misma se justifican y hasta parecen convencer a quienes la padecen de forma más violenta y directa. Los países en vías de desarrollo, por más sobradas razones que parecen tener para querer salir de la crisis, se manifiestan débiles y divididos ante las “ventajas” del pulpo neoliberal. La polución de la atmósfera cada día se hace más densa, los glaciares se van derritiendo aceleradamente… y los primeros síntomas los empezamos a experimentar en Kuna Yala en el mes de noviembre de 2008, e igual pasó hace algunos días. Creo que Nana Olodurwanasob ya tomó la escobilla y va a empezar a barrer; y, según los sailagan, cuando ella barre, lo hace para que aparezca una nueva generación de personas y de seres.

En Kuna Yala, el sentido de la vitalidad de la Madre Tierra que experimentaban los abuelos y las abuelas cada vez se percibe hoy más débil. La nueva generación de los kunas no entiende ni vive la vitalidad de la Madre Tierra, no sabe que Nabgwana está viva, y que, como ser vivo, necesita estar limpia, protegida y defendida para que, a su vez, ella nos defienda, pues para los kunas todo es recíproco y complementario.


¿Qué caminos alternativos de solución tenemos para cambiar la actual crisis ecológica?

El Babigala se expresa claro con relación a la defensa, al cuidado y a la producción de la Madre Tierra. Los procesos históricos del pueblo kuna están marcados por esta perspectiva; podemos citar muchas fechas en las cuales los kunas han tenido que levantarse en armas para defender a la Madre Tierra. Pero estos hitos históricos pueden hacernos perder de vista situaciones más simples que pueden ocasionar grandes desastres. Las autoridades kunas aún no parecen tomar conciencia de la amenaza de muerte que recae en todas las comunidades por la contaminación del mar, de los ríos, de las costas. Nuestra gente se da cuenta de que ya no puede pescar, como antes, cerca de las comunidades; que las sardinas ya han dejado sus sitios privilegiados; que la marea sube e inunda sus cocinas…, pero aún no es capaz de visualizar las causas ni de medir el riesgo que puede conllevar la contaminación.

Desde hace quince años, los Congresos Generales Kunas vienen insistiendo en que la educación, empezando por los niños y niñas más pequeños/as debe ser una de las soluciones de las enfermedades que amenazan al pueblo. La educación nacional, que ya lleva un siglo en la Comarca, no ha hecho más que debilitar la visión y la convivencia armónica de las comunidades. La Educación Bilingüe Intercultural (EBI, proyecto de los Congresos Generales Kunas) retoma como uno de sus contenidos programáticos fuertes la protección del medio ambiente. El niño y la niña, desde temprana edad, deben sentir la necesidad de limpieza, no sólo personal, sino también colectiva, comunitaria. Los cinco ejes fundamentales de la EBI kuna giran en torno a cinco vertientes: vertiente laboral/productiva, autosuficiencia alimentaria; vertiente cultural/religiosa; vertiente ecológica; vertiente científica y tecnológica; vertiente autonómica integral.

Los contenidos fundamentales del proyecto kuna deberán ser retomados como contenidos fundamentales de nuestras actividades pastorales y no tenemos que inventar nada. Creo que estamos viviendo una ocasión privilegiada donde los dueños de la casa nos están diciendo cómo quieren que les acompañemos. Baba y Naba nos bendicen a través del proyecto kuna. Estoy seguro de que no vamos a marginarnos de su proceso.


HIJOS E HIJAS DE LA TIERRA
Perspectivas bíblica y kuna de la Tierra

Por Freddy Ramírez, cmf.
Como cristianos kunas bebemos la Palabra de Dios de dos fuentes primordiales: del Babigala y de la Biblia. Ambas fuentes nos proporcionan la sabiduría de Dios revelada en distintos contextos históricos y geográficos. Sin embargo, contando con éstas diferencias, descubrimos que hay elementos de semejanza que nos unen en nuestra comprensión del Dios Vivo y de la Tierra, pues las cosmovisiones bíblica y kuna están estrechamente vinculados con el trabajo del campo.

La tierra en la cosmovisión bíblica

El pueblo de Israel era una sociedad campesina, completamente dependiente del cultivo de la tierra y de las fuerzas de la naturaleza. Toda su vida religiosa giraba en torno a las cosechas y a los ciclos de las estaciones climáticas. El tema de la tierra aparece ininterrumpidamente desde el libro del Génesis, con el relato de la creación, pasando por el Éxodo y la tierra prometida, hasta llegar a Jesús de Nazaret y su anuncio del Reino, tierra de justicia y de libertad para los pobres desheredados.

En este estudio nos enfocaremos en dos aspectos de la tierra según la Biblia:
1. La comprensión de la relación ser humano-tierra.
2. La tierra como herencia y bendición de Dios para el pueblo.

Profundicemos un poco, desde la perspectiva bíblica, en la relación existente entre el ser humano “Adán-Eva” y la tierra. La palabra hebrea adamáh designa el suelo fértil cultivable, sustancia de la vida misma. Según Génesis 2,7-15, de adamáh Dios creó a Adán, el primer hombre; él fue formado del barro de la tierra. Eva, cuyo nombre proviene del hebro “javáh” = “vida”, es la compañera idónea que Dios da a Adán(Gn 3,20). Dios encomienda a la primera pareja el cuidado de la creación; ambos son una especie de “mayordomos” o “encargados” de velar por la recta administración y el respeto de la naturaleza, protegiendo especialmente a los más débiles. También ellos son “obreros” y “artesanos”: se relacionan con la tierra por medio del trabajo. Son “pastores”, pues atienden a los animales y les ponen nombre.

¿Por qué sucede entonces la creación entera ha sido sometida a la destrucción y explotación desmedida, si el ser humano ha recibido la misión de Dios de velar por el orden justo de la tierra?

Según el mito del Génesis, la armonía primera se quiebra cuando los seres humanos se tornan irresponsables y desobedecen a Dios. El primer pecado se fundamenta en el querer decidir por sí mismos, incumpliendo la voluntad divina de justicia y armonía. Es la búsqueda de poder, del querer tener pleno “conocimiento del bien y del mal” como Dios, la que da como fruto el desequilibrio en las relaciones sociales y en las relaciones del ser humano con la naturaleza.

Algunos críticos ecologistas han querido ver en el concepto de “mayordomo” el fundamento bíblico del actual desastre ambiental. Sin embargo, tenemos que decir que los escritores sagrados en ningún momento han querido justificar la voracidad humana de la explotación de los recursos de la tierra y la injusticia. Más bien ellos reconocen que el ser humano tiene en sus manos una grave responsabilidad: Dios quiere la recta administración de la creación, no su destrucción. Ha sido, más bien, una mala interpretación de la Escritura la que ha querido justificar la explotación indiscriminada e irracional de la creación.

Otra perspectiva esencial en el pensamiento bíblico es que la tierra es herencia y bendición de Dios para el pueblo. El fundamento de esta perspectiva es que la tierra le pertenece a Dios. “Del Señor es el mundo entero, con todo lo que hay en él, con todo lo que en él vive”, dice el Salmo 24. Dios presta la tierra al pueblo para que la administre. Esto supone para el pueblo el no poder disponer de la tierra según le complazca; tiene el deber de trabajarla y vivir en ella en armonía. Dios regala la tierra de Canaán a los pobres del Éxodo liberados del poder faraónico. Por eso el antiguo Israel no conocía la propiedad privada e individual de la tierra, sino la propiedad comunitaria y familiar, al igual que otras sociedades campesinas. Tenía una legislación seria de dejar que la tierra reposara para que no perdiera su vitalidad (Ex 23, 10-11; Lv 25,1-7). Se tenía que practicar la justicia social (Lv 25; Dt 15, 1-19), tanto en la distribución como en el goce de los frutos de la tierra, ya que los pobres tenían derechos sobre ambos (Dt 24, 19-22).

El propósito de la tierra, por tanto, era la vida digna para todos/as. Tales principios entraron en una confrontación seria con los intereses de los líderes del pueblo y con los reinos extranjeros. Los profetas denunciaron fuertemente, de parte de Dios, las atrocidades a que fueron sometidos los pobres en nombre de la idolatría del poder. La tierra, don de Dios, no puede ser tomada como trofeo de los poderosos. La justicia divina se opone al orden imperante de nuestro mundo.


La tierra según la cosmovisión kuna

En este apartado daremos una mirada a la comprensión que la cultura kuna tiene de la Madre Tierra y sus relaciones con ella.

La experiencia religiosa del pueblo kuna está asentada en una íntima relación con la tierra. Todos los relatos del Babigala están enlazados por el hilo conductor de la Madre Tierra. Según nuestros sabios, el amoroso proceso de creación de la Madre Tierra, por parte de Baba y Nana, iba definiendo nuestros espíritus y forjando nuestra propia identidad, es decir, lo que nos define como seres humanos y como pueblo.
A medida que Nana Ologwadule (Madre Tierra) se iba completando, nuestros espíritus también iban tomando su forma, definiéndose al ritmo de ella. Porque gracias a ella seríamos hombres: desde ella nos definimos (Relato de Ologwadule).

La tierra es el principio de la vida; ella representa a la mujer que concibe, gesta y da a luz. De este modo surge nuestra comprensión de la tierra como la Gran Madre. De la misma manera que ella lo genera todo y crea las condiciones apropiadas para la vida, también lo acoge todo y lo recoge todo en su seno. Al morir, retornamos a ella, regresamos a su generoso y fecundo útero.
Estamos hechos para dejar nuestra sangre mezclada con la de Nabgwana. Estamos sobre ella y ella nos acogerá en su seno y, entonces, nuestra sangre volverá a formar parte de su sangre. Ella recogerá nuestros cabellos, nuestros huesos, y los acariciará en su seno… De allí surgimos y allá volveremos como parte de ella. (Relato de Ner Sibu).

Estamos tan estrechamente unidos a Nana Ologwadule que podemos decir que somos “tierra”, pues hemos sido formados con la mejor arcilla, a partir de ella tomó forma nuestro “burba” y a ella volvemos cuando morimos. Tenemos en nuestro cuerpo, en nuestra sangre, los elementos de la tierra y, por eso, no podemos ubicarnos ante ella como ante un objeto extraño y sin vida.
Para cuidar a Ologwadule, Baba y Nana tenían que buscar a alguien que tuviera los sentimientos suyos, el espíritu de ellos. Baba buscó la mejor arcilla, el corazón de la arcilla, la arcilla roja, la arcilla blanca, la arcilla parda. Ocho tipos de arcilla. El varón debía tener el espíritu de Baba, el espíritu de Nana. La mujer debía tener el espíritu de Nana, el espíritu de Baba (Relato de Biler y Bursob).

Baba y Nana nos crearon con el propósito de ser guardianes de la tierra. Nuestra identidad radical como kunas, según el propósito divino, es proteger, hacer productiva y defender la tierra. Baba y Nana nos han llamado a la vida para cuidar de ella, hacerla habitable para todos, conservarla en armonía y belleza. Olonailkabaler y Olonailasob…
...eran los guardianes de la Madre Tierra y eran partes de ella misma. Baba y Nana les procuraron su espíritu... Ellos tenían que defender y proteger la tierra. Tenían que cuidar y hacer producir a esta Madre Tierra. Tenían que contribuir a establecer la armonía entre todo lo creado por Baba y por Nana. Que ninguno robara el terreno de otro; que ninguno fuera más que otro, o menos que otro (Relato de Biler y Bursob).

Pero la primera pareja frustró el plan de Dios dejándose llevar por su egoísmo. Olvidaron las palabras de Baba y Nana y la tierra que recibieron como don, la convirtieron en “propiedad privada”; se dejaron llevar por la locura del poseer. La naturaleza misma se rebeló en contra del ser humano y así se inició una época de caos y dolor en Nabgwana.
… Biler y Bursob hicieron todo al revés. Todo fue caos. Las criaturas se volvieron contra los varones y las mujeres (Relato de Ibeler y sus hermanos).

Ibeler y sus hermanos tomaron conciencia del mal que imperaba en la Madre Tierra y se dieron cuenta de que su sufrimiento era compartido por muchos. Volvieron a sus raíces, a su origen primero y descubrieron que ellos…
…no habían nacido para beber aguas podridas. Sentían las consecuencia de la invasión maligna de la familia de Biler; y por eso se levantaron, se defendieron (Relato de Ibeler y sus hermanos).

Dice Dada Galibe que:
La Madre Tierra estará tranquila y equilibrada cuando todo sea regulado por nuestra inteligencia; y, si no, ella se hace vieja, y puede volverse en contra de nosotros (Relato de Galibe).

Conclusión
Como hemos visto, el pueblo de la Biblia y el pueblo kuna tienen una estrecha relación con la tierra. Las dos cosmovisiones entienden al ser humano como hijo de la tierra. Sin embargo, es en el Babigala donde se expresa con mayor fuerza esa relación filial, ya que los kunas centran su identidad y su espiritualidad en el cuido, la defensa y el embellecimiento de la Madre Tierra. Toda ruptura de la solidaridad con el resto de la creación atrae catástrofes sobre Nabgwana. En una perspectiva semejante, la Biblia nos dice que el egoísmo humano, la injusticia hecha a los pobres y la idolatría del poder provocan que la tierra gima con dolores de parto en espera de la libertad.

Ante el desastre ecológico que vivimos, las perspectivas que se desprenden de ambas cosmovisiones nos pueden ayudar a encontrar caminos alternativos viables.


VOCES DE ABIA YALA

GUATEMALA, 6 de Diciembre de 2008. Fuente: CERIGUA / Argenpress / prensaindigena.org

La resistencia que ejercen varias comunidades indígenas ante los proyectos de minería implementados por los gobiernos en sus territorios ha dado lugar a una nueva forma de practicar democracia, señaló el académico Edgar Esquit, del Instituto de Estudios Interétnicos de la Universidad de San Carlos.

Esquit indicó, en un artículo de opinión publicado en el suplemento Reflexiones, del referido centro de estudios, que hasta julio del 2003 el Ministerio de Energía y Minas de Guatemala había autorizado más de 240 licencias para la explotación minera y 255 exploraciones en regiones indígenas. Con la minería, los indígenas se ven enfrentados ante un Estado que hace caso omiso y deslegitima las formas de organización, las prácticas y conceptos locales sobre territorios, derechos políticos, control de recursos y bienestar de la comunidad, señala el académico.

Dichas comunidades han desarrollado mecanismos de resistencia en los últimos años, principalmente en los departamentos de San Marcos, Huehuetenango e Izabal, la mayoría de ellos habitados por indígenas.

Algunos de estos ejemplos en que los mayas enfrentan al Estado en este proceso son las protestas en los municipios de Sipacapa y San Miguel Ixtahuacán, en el departamento de San Marcos, donde la minera Marlin Mine, de la compañía Montana Exploradora de Guatemala, ha iniciado un proyecto de exploración. En Ixtahuacán se ha formado el Frente Comunal de Resistencia a la Explotación Minera y en ambos municipios los alcaldes auxiliares y comités locales tienen un papel importante en la conducción de las acciones comunitarias. El ejercicio y recuperación de las tradiciones locales en la lucha política son legitimados a partir de leyes nacionales y convenios internacionales como el Convenio 169 de la OIT y el Código Municipal.

Según el académico en este proceso las comunidades no están actuando solas, sino que han establecido alianzas con otras organizaciones que apoyan las luchas que se generan desde las áreas rurales frente a la minería. Se han sumado desde la Iglesia Católica, como en el caso de San Marcos, hasta organizaciones campesinas, culturalistas y de mujeres que retoman el discurso que aboga por la protección de la madre tierra, los derechos del pueblo maya y las comunidades.

La identificación de estos vínculos es importante porque indica que la democracia como participación también se construye mediante estas alianzas. La identidad local maya sigue teniendo una gran fuerza y es un desafío para el Estado, que hasta ahora ha respondido ante los procesos comunitarios en contra de la minería desde los discursos sobre el multiculturalismo y el Estado de Derecho.


URUGUAY, 31 de Diciembre de 2008.
Fuente: ANSA / AIPIN

Representantes de la etnia charrúa impulsan un proyecto de ley que establece el 11 de abril Día de la Resistencia de la Nación Charrúa y posibilita la incorporación de la temática indígena en la educación en Uruguay, donde el 5 por ciento de la población tiene ascendencia aborigen.

El proyecto constituye “un acto de reconocimiento y justicia póstuma a los que generosamente ofrecieron su vida por nuestra tierra, libertad y dignidad”, dijo Enrique Auyanet, de la Asociación de Descendientes de la Nación Charrúa. "Poco a poco, una buena parte de nuestra sociedad, que no sentía como suyo el pasado indígena comienza a reconocerse", dijo al diario La República Auyanet.

En efecto, en la última década los uruguayos que se identifican como indígenas pasaron de 12.500 a 115.118, un 5 por ciento de la población total, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas.

A iniciativa de los diputados Edgardo Ortuño y Carlos Maseda, a inicios de 2009, la Comisión de Constitución y Código de la Cámara Baja analizará el proyecto que, en su artículo único, posibilita la incorporación de la temática indígena en la educación, objetivo perseguido por décadas, subrayó Auyanet.


PERÚ, 16 de Diciembre de 2008.
Fuente: Unión Radio, EFE / AIPIN

Los indígenas matsés se oponen a la actividad petrolera de la empresa canadiense Pacific Stratus Energy en sus tierras comunales, situadas en una zona remota de la Amazonía peruana, publicó hoy el diario limeño El Comercio.

Pacific Stratus Energy intentó dialogar con los matsés el 3 de diciembre pasado en el poblado de San José de Añushi, cerca de la frontera con Brasil, en lo que fue el primer encuentro entre las partes desde que el Estado peruano adjudicara en noviembre de 2007 los lotes petroleros 135 y 137 a la empresa canadiense.

Ese día, los apus (líderes comunales) de los matsés recibieron al coordinador ambiental de la petrolera, Víctor Suárez, junto a otros indígenas armados con arcos y flechas o que portaban carteles en los que se leía: “no queremos empresa”, según relató el diario peruano. El representante de la Defensoría del Pueblo, Daniel Vela, quien acompañó a Suárez, le pidió que terminara la reunión porque no se daban las condiciones para el diálogo, que hasta la fecha no se ha reanudado.

Los matsés, indígenas contactados hace cuarenta años, tienen una organización tribal, se dedican a la caza y recolección, y “su fama de guerreros nómadas hizo que los caucheros los temieran como a los capanahuas (otra etnia) y su fiereza es tal que hace nueve años no entra ningún maderero a su zona”, recalcó el diario.

Ahora estos indígenas piden al Estado que amplíe sus territorios para incluir nuevos anexos y crear una reserva comunal de 120.000 hectáreas en un bosque que según el Field Museum of Chicago posee una riqueza singular y es hábitat del águila arpía, en peligro de extinción, y donde además se ubica el lote 137 que fue concedido a la petrolera canadiense. Según el gerente general de Pacific Stratus, Enrique Ramírez, los pedidos de diálogo han sido “frustrados por la directiva matsé”.

Ramírez admitió que en el pasado muchas petroleras han sido causantes de la contaminación, pero acotó que ahora la actividad petrolera está mejor regulada por las leyes y vigilada por las organizaciones internacionales. Perú es escenario constante de conflictos por la tierra entre comunidades indígenas, las empresas y el Gobierno, debido a que muchas veces las etnias ven su hábitat amenazado y el Estado necesita recursos energéticos, que abundan en la zona.


BRASIL, 17 de Enero de 2009.
Fuente: EFE / ddiaz@midiario.com

Al menos 54 indios fueron asesinados en 2008 en Brasil en conflictos por sus tierras o por la defensa de sus derechos, lo que significó una disminución del 40 por ciento frente a las 92 muertes registradas en 2007, informó hoy una organización vinculada al episcopado brasileño. Según datos de la Consejo Indigenista Misionero (CIMI) de la Iglesia Católica, el número de indios muertos el año pasado fue prácticamente igual al de 2006 (57).

La situación más grave se registró en el estado de Mato Grosso do Sul, en el centro-oeste de Brasil y fronterizo con Bolivia y Paraguay, en donde se registraron 40 asesinatos y 34 suicidios de indios el año pasado. El número de suicidios en Mato Grosso do Sul creció un 50 por ciento frente a los 22 de 2007 y el de homicidios se redujo en un 25 por ciento frente a los 53 del año inmediatamente anterior.

Mato Grosso do Sul, una de las principales fronteras agrícolas de Brasil, es uno de los estados con mayor población de indígenas y una de las regiones con mayor número de conflictos por las tierras, ya que los indios están concentrados en pequeños terrenos. “El CIMI sigue alertando por la grave situación del pueblo Guaraní Kaiowá en Mato Grosso do Sul. Entre asesinatos y suicidios fueron 74 casos en 2008 y 75 casos en 2007 en una población de cerca de 40.000 personas”, señaló en un comunicado la organización.

“La falta de tierra y el confinamiento en pequeñas aldeas son las principales razones, en la evaluación del CIMI, para la constante amenaza a la supervivencia física y cultural de este pueblo”, agrega la nota del consejo del episcopado, que calificó la situación como un “genocidio”.

El organismo denunció que el año pasado los latifundistas de la región ejercieron una fuerte presión económica y política contra el inicio de los estudios antropológicos para la identificación de las tierras que pertenecen históricamente a los Guaraní Kaiowá y que el Gobierno, ante tales presiones, decidió aplazar el proceso de limitación de una reserva para ese pueblo.

De acuerdo con el CIMI, además de los asesinatos, el año pasado también se registraron “graves casos” de agresiones a los indígenas en todo Brasil como consecuencia de la discriminación y la disputa por tierras y fuentes de agua. El organismo asegura que en algunos de esos casos el mayor agresor fue el propio Estado por intermedio de la policía.

El CIMI también manifestó su preocupación por la situación en el estado amazónico de Roraima, en donde hacendados se niegan a abandonar una gigantesca reserva creada por el Gobierno.

Pese a que el conflicto está en manos de la máxima corte de justicia del país, los indios de la región han sido víctimas de atentados y de amenazas. “Además de las agresiones que resultan en daños físicos, 2008 quedó marcado por la intensa campaña racista contra los pueblos indígenas en los principales medios de comunicación del país”, asegura el CIMI.


CONOZCAMOS NUESTROS DERECHOS
(Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas)

Artículo 25
Los pueblos indígenas tienen derecho a mantener y fortalecer su propia relación espiritual con las tierras, territorios, aguas, mares costeros y otros recursos que tradicionalmente han poseído u ocupado y utilizado de otra forma y a asumir las responsabilidades que a ese respecto les incumben para con las generaciones venideras.

Artículo 26
1. Los pueblos indígenas tienen derecho a las tierras, territorios y recursos que tradicionalmente han poseído, ocupado o de otra forma utilizado o adquirido.
2. Los pueblos indígenas tienen derecho a poseer, utilizar, desarrollar y controlar las tierras, territorios y recursos que poseen en razón de la propiedad tradicional u otra forma tradicional de ocupación o utilización, así como a aquellos que hayan adquirido de otra forma.
3. Los Estados asegurarán el reconocimiento protección jurídicos de esas tierras, territorios y recursos. Dicho reconocimiento respetará debidamente las costumbres, las tradiciones y los sistemas de tenencia de la tierra de los pueblos indígenas de que se trate.


La Madre Tierra está llena de inmensas riquezas; y por eso las amenazas son también numerosas (Ner Sibu).